El proceso comienza calentando el horno a una temperatura de entre 200 °C y 300 °C.. Esta etapa de pretratamiento a baja temperatura elimina principalmente la humedad y los compuestos orgánicos volátiles de las baterías.. Descubrirá que este paso ayuda a prevenir explosiones de vapor y reduce el riesgo de incendios incontrolados.. También suaviza la carcasa externa y prepara los materiales de la batería para una descomposición eficiente en etapas posteriores..

